Proyecto Copla de comunicación y política
|
La semana. Por Néstor Piccone, Psicólogo, periodista. Proyecto Copla.
Caminar. La gente se lanza a las calles por distintos motivos. Este fin de semana largo, mucha gente salió a ocupar el espacio público. Muchísimas/os argentinas/os que no fueron tenidos en cuenta por los grandes medios pero que pusieron el cuerpo para mostrar sus convicciones, sus creencias.
Hebe de Bonafini reconoció alguna vez que recién luego de la Marcha Federal del año 1994 pudo cantar el himno nacional con alegría, ya que pensaba que esa era una música símbolo de los milicos.
La peregrinación a Luján, que tuve oportunidad de conocer a fondo este fin de semana, me demostró que es una caminata de carácter universal, que no es sólo para los militantes de la iglesia ni para los fieles más activos. Es un acto de fe pero un desafío que miles de hombres y mujeres realizan en busca de encontrarse con su devoción pero también consigo mismo, con lo que el ser humano es capaz de hacer por lograr un objetivo o por lo menos intentarlo. Horas de caminata, junto a otros a los que se alienta para que lleguen porque también hay miles de voluntarios (médicos, paramédicos, colaboradores) que se acercan para que otros alcancen su meta. Esa meta subjetiva que silenciosamente se lleva adentro por más de 50 kilómetros de andar a pie.
La Virgen y la peregrinación a Luján son dos símbolos de unidad nacional. En la marcha caminan por la misma calle -sin confrontar- militantes kirchneristas esos que llevan en sus gorritos el Clarín Miente, con caceroleros sin cacerolas; hinchas de Boca y River, de San Lorenzo, de Huracán. “Todos unidos porque hay algo superior que los une: la fe y la Virgen que es la patrona de la Nación.” Según definió una joven pediatra mientras coordinaba la atención de cientos de caminantes que demandaban por calambres o ampollas. Jóvenes a Luján: una marcha que nació por el año 1975.
Hay marchas de unidad nacional que no se registran porque contradicen la lógica de la confrontación que la expectacularización de la notica invisibiliza. Hay marchas con jóvenes que apuestan al futuro, que creen, que caminan a favor aunque sean oficialistas u opositores, que transitan en paz, calles que no son tan salvajes
En Misiones, mujeres argentinas de distintos signos, llenaron las calles de Posadas asumiendo sus contradicciones ideológicas y políticas pero unidas a favor de las reivindicaciones de género. Comenzaron en el año 1985 con esta gesta que crece año a año. Marchas de distinto signo pero todas ganando la calle en un mismo fin de semana.
Un fin de semana largo que amenazaba “haevy” por la insubordinación de un grupúsculo de fuerzas de seguridad alentadas por los medios a sumar ruido al blandir de las cacerolas.
En el año 1987, desde la Utpba, los periodistas organizados sindicalmente, emitimos un comunicado por el cual se pedía “no darle micrófono ni pantalla a los golpistas.” Fue en aquella Semana Santa en la que los carapintada quisieron llevarse puesta a la democracia que encabezaba Raúl Alfonsín. El pedido gremial, si bien trajo polémica, sirvió para marcar un límite. Una cosa es demandar reivindicaciones a la democracia y otra muy distinta es protestar a viva voz contra ella, sus instituciones o la figura presidencial. Hay límites para quienes pretenden romper el contrato social, aunque los Medios hoy lo desconozcan.
Los Medios no harán ningún golpe, ni secuestrarán a ningún testigo. Tampoco se pondrán a la cabeza de una marcha y mucho menos expondrán su poder en alguna contienda electoral, pero son ellos los que, orientados a defender el poder de quienes lo detentan, ordenarán el dispositivo tecno-económico-mediático, que es algo más que un diario o un grupo multimedio monopólico.
CHAVEZ y el Proyecto Latinoamericano. Hugo Chavez ganó nuevamente en Venezuela. La oposición venezolana le está buscando la vuelta pero no logra desbancar al proyecto político, popular y latinoamericano. Por eso en la Argentina nadie debería entusiasmarse demasiado por el son de las cacerolas ni creer que los operativos de prensa pueden más que la convicción de los pueblos.
Néstor Piccone
No hay comentarios:
Publicar un comentario