lunes, 12 de septiembre de 2011

Domínguez: "Argentina se incorporó a los países productores de alimentos con mayor valor agregado"

Al participar de un seminario del G-20 en Turquía, el ministro de Agricultura, Julián Domínguez, destacó que, con la investigación en biotecnología y genética, Argentina "incrementará la producción de alimentos en diez años cuando el resto del planeta lo va a hacer en los próximos cuarenta años".
El ministro arribó esta tarde a Estambul para participar de la Conferencia del grupo de países que integran el G-20, con el objeto de debatir sobre la volatilidad de los precios internacionales de las materias primas.

En su exposición, Domínguez afirmó que “el principal riesgo en la economía global, hoy, no pasa por los aumentos de los precios de los commodities, ni por el sobrecalentamiento de las economías emergentes, sino por la caída del producto global y la posibilidad cada vez más concreta de un largo periodo de crecimiento estancado en los países desarrollados”.

Asimismo, el titular de la cartera agraria sostuvo que “la pobreza y la injusta distribución de la riqueza son la causa del hambre en el mundo; no el aumento del precio de los commodities. 

"La demanda de alimentos de la población mundial es creciente en cantidad y calidad, y la oferta es cada vez más restringida. Estamos poniendo todo el empeño nacional en dar respuesta a esta meta, incrementando el grado de calidad para generar valor agregado y así industrializar la ruralidad”, subrayó. 

Domínguez señaló, entonces, que “dejamos de ser una colonia para incorporarnos a los países productores de alimentos con mayor valor agregado”.

En declaraciones a la prensa, el ministro dijo que “la clave es producir más, y esto se logra mediante la investigación en biotecnología y genética para optimizar la productividad. No coinciden los discursos que inmovilizan la investigación y el desarrollo mientras millones de hermanos se mueren de hambre”. 

Sobre la planificación estratégica, el funcionario remarcó que “Argentina ha puesto en marcha un Plan Estratégico Agroalimentario y Agroindustrial que lo coloca en el liderazgo de las naciones del mundo en la programación de su aporte agroalimentario al planeta". 

"La Ley de Tierras, la promoción del seguro multi-riesgo y un procedimiento homologado con los países del BRIC (Brasil, Rusia, India, China), nos ubica en la puerta de inversión en materia de investigación biotecnológica y genética agrícola", indicó.

Revolución de la Pampa

Al exponer los avances de la tecnología aplicada a la producción agroalimentaria, Domínguez señaló que “la primera revolución de la Pampa en la Argentina hizo posible que en casi el 80 por ciento de la superficie se utilice la siembra directa, lo que permite una reducción de los costos operativos, la simplificación de las tareas y la mejora de la eficiencia de la mano de obra". 

"El sistema de siembra directa mejora en promedio un 25% la eficiencia del uso del agua, mejora los niveles de producción y contribuye a realizar un mejor uso y conservación de los recursos naturales involucrados en el proceso productivo”, precisó el ministro.

Agregó que, además, "permite reducir el uso del combustible fósil, en promedio, entre un 40 y 50% respecto a la labranza convencional. Esto representa tanto ventajas económicas como ambientales, ya que reduce las emisiones de gases efecto invernadero y promueve el secuestro de carbono en el suelo”.

“Con la investigación en biotecnología y genética, Argentina inició la segunda revolución de La Pampa. Vamos a incrementar la producción de alimentos en diez años cuando el resto del planeta lo va a hacer en los próximos cuarenta años”, precisó el titular de la cartera agropecuaria.

Cambio de paradigma

“Junto a Brasil, estamos trabajando en darle visibilidad a la defensa de los países productores de alimentos”, indicó el representante argentino en el G-20, y ponderó la figura del titular de la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO): “Que un mercosurino como José Graziano da Silva presida la FAO, es la señal de un cambio de paradigma”, dijo.

En el seminario del G-20 que se realiza en Estambul, los funcionarios buscarán avanzar en un plan de acción antes de la próxima cumbre de ministros de Economía del G-20, que tendrá lugar la semana del 20 de septiembre durante la Reunión Anual Conjunta del FMI y el Banco Mundial, en Washington.

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